Estepa envolverá FITUR con el aroma de la tradición

Triana Abad.

En el sureste de Sevilla y lindando con las provincias de Córdoba y Málaga encontramos Estepa, una ciudad que quiere hacer que su aroma sea Patrimonio Inmaterial de la Humanidad.

Situado en el centro de la Comunidad Autónoma de Andalucía, en la comarca de la Sierra Sur de Sevilla, es conocido mundialmente por la elaboración de mantecados y polvorones.

Emblema de la ciudad

El origen de la producción de estos exquisitos dulces navideños en Estepa se lo debemos al convento de Santa Clara, y el comienzo de su comercialización a Filomena Micaela Ruiz Téllez, conocida popularmente como ‘La Colchona’, ya que desde la segunda mitad del siglo XIX contaba con una amplia clientela en diferentes provincias. Su marido, Manuel Fernández Tenllado, era corsario y distribuía por los pueblos y ciudades cercanos los magníficos dulces elaborados en el obrador de su esposa. Así surge la primera empresa familiar dedicada a la elaboración y comercialización del mantecado.

A lo largo de la primera mitad del siglo XX, existieron en Estepa casi 300 fábricas de mantecados y polvorones, muchas de ellas de carácter familiar. En la actualidad la tecnología más avanzada se combina sabiamente con la tradición de las viejas recetas de sus antepasados.

Cada otoño, esta milenaria ciudad se inunda de aromas y especias que embriagan los sentidos. Los mantecados, polvorones y dulces típicos, colman los hogares de España en Navidad. Actualmente están amparados por la IGP mantecados y polvorones de Estepa.

La industria

Estepa a lo largo y ancho de su centro histórico llegó a tener cerca de 300 fábricas de mantecado. Eran pequeños obradores en las casas familiares, pero que poco a poco, ha dado paso a la industria más emblemática de la ciudad, que hoy día cuenta con 23 fábricas de mantecado, y son los que, prácticamente, le han dado el nombre a Estepa, tanto dentro de España como como fuera de ella, al calor del mantecado.

También a otros sectores de la industria auxiliar, industrial, transporte, artes gráficas, cartón, y también la industria de la fabricación de la maquinaria. Cabe destacar que la maquinaria con la que se hacen los mantecados y polvorones en Estepa, también se fabrica en Estepa. Toda esta industria auxiliar ha tenido un gran éxito a lo largo de los años.

Tanto el sector del mantecado, la industria auxiliar, como el mejor aceite el mundo, que se comercializa bajo la marca Oleoestepa, son los grandes motores económicos que sostienen a Estepa.

Patrimonio Natural

Más allá del mantecado y polvorón, Estepa es una ciudad milenaria, ciudad que tiene un gran potencial turístico como ciudad patrimonial.

Poco a poco el visitante ha ido tomando interés por visitar la ciudad, su centro histórico, sus monumentos, y también por quedarse a comer en los magníficos bares y restaurantes que ofrecen, tanto cocina tradicional como cocina de vanguardia.

Podemos hacer diferentes tipos de turismo. Industrial, ya que sus fábricas son visitables, pero también una oferta complementaria como es el turismo natural, destacando el complejo de Roya, un manantial que cuenta con una fuente y abrevadero de ganado construidos hacia 1733 y que durante siglos fue el punto de abastecimiento de agua de la población.

Situado dentro del complejo hotelero de Roya a los pies de la Sierra, cuenta con magníficas vistas y caminos para desarrollar actividades en la naturaleza.

En su entorno predomina el bosque mediterráneo, siendo el acebuche la especie que ocupa más extensión, y es común poder avistar rapaces como el águila o el milano negro algunas épocas del año.

Encontramos un lugar privilegiado dentro del macizo montañoso de la Sierra Sur sevillana, donde podemos adentrarnos por sus vías pecuarias y sus caminos, poder divisar la rica flora y fauna realizando senderismo y cicloturismo, pero también se pueden desarrollar actividades de astronomía.

Se puede disfrutar aquí de un buen cielo y de una de una cumbre alta en el término municipal de Estepa, que se encuentra a 830 metros de altitud y se puede disfrutar de una magnífica jornada de astronomía, en una de una noche despejada.

Fiestas

Se caracteriza por sus fiestas y tradiciones. Concretamente, la Semana Santa está declarada de Interés Turístico de Andalucía. Destaca por su rica imaginería y son las propias hermandades las encierran un rico patrimonio.

Las procesiones de Semana Santa son auténticos escenarios barrocos, contando con un escenario como su centro histórico, que posee calles estrechas y empinadas por la que rozan los varales de la Virgen. Sin duda, una visita que no debe faltar en la agenda.

Adentrándonos en la primavera, se celebra la romería de San José Obrero, precisamente, en el paraje de Roya.

La octava de los Remedios es la fiesta sublime de municipio, la fiesta del barrio ‘chuletero’ como se conoce comúnmente, pero dónde se suma toda Estepa en el tercer domingo de mayo. Se puede poner en valor, como elemento más característico, la subida de la Virgen el lunes después del tercer domingo de mayo, dónde gran cantidad de la población, como también de los visitantes, se acercan a verla.

Importante también la Velá de Santa Ana, en el barrio ‘Mondonguero’. Y luego, la fiesta de la patrona en el mes de agosto, que celebra su verbena en el centro del pueblo. Hay una rica tradición mariana en Estepa, que termina con la salida procesional de la Virgen del Carmen el día 12 de septiembre.

Patrimonio arquitectónico y cultural

El Monasterio de Santa Clara, concretamente su iglesia, es del siglo XVII. El Monasterio de Santa Clara es fundado por los segundos marqueses de Estepa en el siglo XVI, construido para su segunda hija, María de Centurión, que se convertiría en sor María de Santa Clara, Madre Fundadora de dicho convento.

El convento cuenta con un patrimonio riquísimo y bien conservado. Hace las delicias poder disfrutar de una imaginería original en el templo, única, además del retablo mayor de la iglesia. Es de una sola nave de tipo conventual, dónde vamos a ver las imágenes de San Francisco de Asís y Santa Clara, San Pedro y San Pablo, y una pequeña imagen de la Virgen del Pilar.

En este convento vamos a ver imágenes de Pedro Ruiz Paniagua, el retablo es completamente de Luis Salvador Carmona, y cuadros y obras de artistas españoles importantes del siglo XVII. Este convento, además, vio nacer el mantecado de Estepa en su cocina, en el siglo XVII. Fueron unas monjas de clausura las que idearon esa receta original estepeña.

En el Cerro de San Cristóbal encontramos la torre del homenaje, torre albarrana erigida por el maestre santiaguista Lorenzo Suárez de Figueroa, y el Centro de Interpretación ‘Estepa Tartésica’, que alberga los restos musealizados de la ciudad que, desde el siglo noveno al quinto antes de Cristo, coronó el Cerro de San Cristóbal.

A los pies del Cerro de San Cristóbal vamos a encontrar un patrimonio de lo más notable, compuesto de cinco iglesias, en su mayoría barrocas, con gran riqueza retablística, imaginería y pictórica. Vamos a descubrir tres ermitas, también, de una riqueza muy singular, y hallaremos, por ejemplo, el palacio de los marqueses de Cerverales. Una casa solariega, y uno de los pocos ejemplos civiles que encontramos en Andalucía, que hoy en día se encuentra en perfecto estado de conservación, y que está abierta la visita guiada.

Este palacio resalta sobre el resto de las casas por sus columnas salomónicas, que son las que nos dan la bienvenida a esta vivienda.

Vamos a encontrar otros puntos emblemáticos de esta localidad pertenecientes a su pasado, que nos van a hablar de toda la historia que ha pasado por el municipio, y que cuentan con esa riqueza patrimonial que hoy conservan y muestran al visitante para su disfrute.