Un pregón de concurso para un año con verdeo pero sin feria

Un pregón de concurso para un año con verdeo pero sin feria

Por Sandra Jiménez Paredes

La empresa envasadora de aceitunas La Reina del Verdeo de Arahal organizó la semana pasada dos concursos para celebrar, aunque fuese de una manera diferente, la Feria del Verdeo. Los concursos fueron para elegir el mejor cartel y el mejor pregón del verdeo, símbolos de la Fiesta.

Han enviado cuatro pregones y 11 carteles en las distintas modalidades, infantil y adulto. El pregón ganador es de una joven arahalense y, de forma escalonada, da un repaso a la actualidad, incluye parte de sus vivencias relacionadas con el verdeo sin dejar atrás la importancia de la Feria. Este es el pregón.

Un pregón de concurso para un año con verdeo pero sin feria

«Excmo. Sr. Alcalde, Concejales de la Corporación, Aceituna de Oro, Autoridades, Reina y Damas, vecinos y vecinas de Arahal, BUENAS NOCHES.

Así suele empezar el pregón nuestro y me niego a hacerlo de otra manera en un año tan atípico como éste que nos ha tocado vivir. Un 2020 empeñado en dejar claro el valor de lo importante, la relatividad del tiempo y el sentimiento de que formamos parte de un todo. Una situación que nos ha empujado o impulsado, no sabría decir, a tomar conciencia colectiva y ser más solidario, que la única forma de parar esto es juntos y estando unidos.

En Arahal, Septiembre siempre llega con un TODO VA A SALIR BIEN. Parafraseando a Juan Carlos Aragón, el que sea carnavalero sabe que Septiembre calienta café y devuelve también a la calle el ruido. Porque los dolores de nuestra gente se curan en medio de un tajo y aunque se llame Septiembre sabe a agüita de mayo. Y es que es en este mes cuando la riqueza de nuestro pueblo aumenta, se crean puestos de trabajo y vemos los frutos. Los frutos del esfuerzo de todo un año y bien es sabido que el que siembra quiere recoger. Con la IGP casi de estreno, esta campaña se prevé bastante complicada por la necesaria implantación de medidas anti-COVID. Hasta la eterna batalla de precios ha quedado este año en un segundo plano. Un 2020 de incertidumbre, sin duda.

Decir incertidumbre, no es decir miedo. Ante la adversidad hay que buscar certezas. El valor de nuestra aceituna es una de ellas. “De las tapas reina y de la mesa dama”. Las primeras del año de cada variedad se presentan al pueblo en el acto de coronación. Lástima que este año no tenga lugar. La plaza del Santo Cristo se quedará en silencio, esperando. Atrás también quedó un deslucido Jueves Santo. Santa Caridad y Misericordia, compadécete de los que sufren y ofréceles ayuda.

La Residencia Madre Encarnación recibió el apoyo de las distintas hermandades. Diferentes instituciones, asociaciones y empresas particulares prepararon comida e hicieron donativos para la protección de los trabajadores y usuarios del centro. El Club OHMIO y el Arahal F.C colaboraron con el reparto de mascarillas y en la tarea de desinfección de calles. En esta dura lucha, nuestros agricultores también estuvieron ahí. Con una mezcla mitad cloro / mitad esperanza rociaron nuestro suelo con sus tractores y equipos de fumigación. En definitiva, con esta situación pienso que hemos crecido como pueblo y lo que es más importante hemos crecido como comunidad.

Cartel primer premio infantil. Autora: Carla Cortés.

Como saben, las personas mayores tienen un mayor riesgo de enfermar gravemente por causa de coronavirus. Y respóndanme vecinos y vecinas, ¿qué es un olivar sin olivos viejos?. ¿Qué es un olivo?, se preguntó Alberti.

Un olivo

es un viejo, viejo, viejo

y es un niño

con una rama en la frente

y colgado en la cintura

un saquito todo lleno

de aceitunas.

Mi abuelo Rafael hacía pleita. “Chiquita, separa antes los ramales y haz una trenza”. Que no, que no, que el macaco no es una cesta. El macaco es un símbolo, un santo y seña. Que hagan lo que hacía mi abuelo, ¿cuántos quedan?. Para sobrevivir el árbol necesita savia nueva. Recientemente ví en las redes sociales una publicación de Rosa González Portillo. Compartió los canastos, bolsos, cestos que aún hace su padre. Hasta quincanas de mimbre 100% artesanales. LA QUINCANA, bonito nombre para una tienda de productos gourmet. Porque gourmet también era lo que mi abuelo Valentín traía de vuelta. Apartaba de su comida lo más especial con la ilusión de que mis tíos y mi madre lo encontraran después y se lo comieran. Vecinos, se está perdiendo el mimo, la pausa del trenzado. Lo que dura, lo hecho a mano.

Y hablando de tiempo invertido, 33 años tengo y de la fábrica solo recuerdo la morera. Sus hojas sirvieron de alimento para mis gusanos de seda. Callejón de Para’, caminito del colegio, solitario molino movido por el viento. Momentos vividos que vienen a mi cabeza como el fogonazo de una foto capturada para el recuerdo. Y en este momento del pregón es de recibo mencionar a Alfonso Pereira Domínguez, por la donación altruista de su maravillosa colección fotográfica al archivo histórico de Arahal. Enhorabuena Alfonso por poner cara y nombre a nuestra historia.

¡Ains, nuestra historia¡. La misma de siempre si no fuera por la osadía de la gente valiente.

Yo quiero que mi aceituna sea como la aloreña. Reconocida por todos, la araeña. Por eso hay que aplaudir la gesta de empresarios locales como ACEITUNAS LA PRIETA, innovando con algo tan nuestro y tan desconocido a la vez fuera de nuestro termino municipal. LA PRIETA, actualmente creciendo en puntos de venta y sistemas de distribuición.

Digna es también de mención la labor de la empresa familiar LA REINA DEL VERDEO. Tan arraigada a Arahal y a sus costumbres que ha propuesto este peculiar concurso con el fin de que el 2020 no se quedara sin su pregón. LA REINA DEL VERDEO fue la primera envasadora de Arahal en inscribirse en la IGP de Aceitunas Manzanilla y Gordal de Sevilla. Aceitunas selectas de cosecha a macaco. A mano. Y es que esta empresa no puede estar en unas mejores, las de María José Sánchez Domínguez. De su figura femenina me valgo para exigir dignidad. La justa, la precisa. Dignidad para la mujer agricultora. Ya está bien de vivir siempre arrodilladas. La lucha del 8 M está y debe de estar en el campo. Se acabó lo de “Ve y corre y estira del fardo”. Dos mujeres sólas también saben llevar un banco.

Reivindicaciones necesarias aparte, quiero desearos una feliz feria 2020. Seamos responsables y vivámosla desde casa con nuestra unidad de convivencia estable. Que no se arme después la Marimorena. Quédate en casa. Decórala al estilo del Cortijo Viejo. De lunares o Dando la nota, Eso es lo de menos. Que hay que salir Al paso y De todo un poco quiere la vida. No te pongas Vinuo, Mosnstruo. Se Granuha y conéctate con Al compás de Los Amigos. Ya estamos Aquí, YO ERO, YO ERO, yo ero ustedes. Los que faltaban. Corta conexión que Aquí nos amanece y De aquí al banco. Que A menos cuarto, que hay que salir Arreando luego. Date Lerele y no Rincón cubano, que hay que Sudor Flamenco, hermano.

Para ir terminando, no hay pregón sin agradecimientos. Cada tachón, cada punto y cada coma te los dedico a ti papá. Porque no hay palabras, solo existen pausas cuando pienso en ti. A mi madre, que es mi manga de camisa y la cinta de mis dedos. A mi tío Luis, el pavuseno, que me llevo a coger por vez primera. A mi tío Antonio Jiménez Antequera y a Manuel “el orejita”, por estar cuando más los necesité. A la familia Álamo, por bajarme la carga en el puesto antes de que yo quitara las llaves del coche. Ellos no lo saben pero las quitaba llorando. A 2 G Formación por un gran detalle. A los hermanos Bala por lo aquel viejo Ebro y finalmente, al abuelo de un amiga recientemente fallecido, en su memoria y la de tantos otros que murieron simple y llanamente por no poder volver a pisar el campo. Dicen los hermanos GARCIOLIVA que el mejor abono del olivar es la suela del zapato de su dueño. Yo pienso que casi que es recíproco. Que el olivar es vida y por eso la da.

Me he abierto en canal y he encontrado aceituna. Puede que esto me haya servido de catársis. Podría decirse incluso que hasta de poda. Cortar para crecer este plantón que ya no es tan nuevo. Cambia de suelo si quieres pa’ que te salgan las ramas pero a echar raíces al pueblo, que es donde agarra.

“Arrecoge las del suelo”- dijo el modesto manijero. Así que no me vengan a mí a tirarme magdalenas, que yo nací en Septimbre y me crié en la verea’. Lo rancio puede apestar si uno no se informa. Si nunca fuiste anca Revilla a comprar puntillas, mejor habla sólo de las cositas de Sevilla.

Arahal no cumple años, cumple verdeos. Manu Sánchez, pregonero 2016. ESTAMOS DE CUMPLEAÑOS VECINOS Y VECINAS. Felicidades a todos.

LARGA VIDA AL VERDEO, FELIZ FERIA Y QUE VIVA ARAHAL».

La foto que ilustra esta información corresponde al cartel premiado en el concurso en la modalidad adultos, cuyo autor es Alberto Ruiz.