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Sociedad

Piden con una cruz funeraria que la carretera que cruza su barrio deje de ser un peligro

Los vecinos de Pozo del Camino están hartos de vivir en un peligro constante por el hecho de que una calle de esta barriada sea, en realidad, una carretera.

Se trata de una barriada que, de por sí, tiene la especial característica de pertenecer a dos ayuntamientos, los de Isla Cristina y Ayamonte. Pero ya están más que llenos de promesas y han decidido pasar a la acción.

La calle Carretera, la que atraviesa el pueblo para llegar desde Isla Cristina a la N-431 es un peligro. Los coches pasan a gran velocidad en demasiadas ocasiones por la A-5150, esa carretera que atraviesa la calle que tienen que usar para todo. En su día se «solucionó» el problema con un semáforo que funciona solo a ratos, y que, además, no es respetado.

En ese semáforo, esta mañana ha amanecido una cruz fúnebre adornada con flores, para llamar la atención a quien corresponda del peligro que sufren en esta barriada por, entre otras cosas, el hecho de que a nadie se le ha ocurrido hacer una carretera que la rodee.

La cruz se encuentra en un semáforo inútil situado ante una guardería. Todo un símbolo del peligro que corren familias y menores cada día para poder, simplemente, ejercer su derecho a estar cuidados.

«Pedimos badenes, pero de verdad»

Los vecinos quieren soluciones. Aseguran que la Junta de Andalucía comunicó al Ayuntamiento de Ayamonte en su día que poner badenes en esa carretera ralentizaría el tráfico. En realidad, la carretera en sí ya es un cuello de botella, pero sobre todo en verano. De septiembre a junio el tráfico se reduce considerablemente, y que los vehículos se tengan que detener de vez en cuanto no parece un problema grave visto el peligro que sufren en esa calle a diario.

«Pedimos badenes de obras, no semáforos que no funcionan o badenes de goma, que los coches se saltan sin respetar nada», dicen los vecinos, que recuerdan que cruzar la calle es un ritual a diario para centenares de personas, en una barriada dividida literalmente por esta carretera.

Así, por encima de «semáforos de adorno», reclaman soluciones. Por el momento, una cruz fúnebre recuerda a los conductores desde hoy que el hartazgo de los vecinos no es por casualidad. Y no es la única movilización que van a realizar en un otoño que prevén caliente en busca de dejar de vivir en un constante peligro.

Periodista corresponsal de la Agencia EFE, El Correo de Andalucía, eldiario.es... entre otros medios. Cubre principalmente Huelva y Sevilla en varios medios radiofónicos y prensa digital.

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