Aprobada por unanimidad una moción del PP de Arahal para el arreglo de las cubiertas del colegio San Roque

Todos los grupos políticos del Ayuntamiento de Arahal aprobaron una moción presentada por el PP este jueves, en sesión plenaria, en la que insta al equipo de gobierno a arreglar las cubiertas y problemas de humedades del CEIP San Roque que ha afectado a tres aulas cerradas desde septiembre de 2021.

La alcaldesa de Arahal, Ana María Barrios (IU), se comprometió a encargar el proyecto y buscar la financiación para pagar la obra, aunque también dijo que buscaría la manera de reclamarlo a la Junta de Andalucía porque estaba segura que “no era de su competencia”. 

La obra puede superar los 200.000 euros. Según la moción presentada por el PP, el Ayuntamiento realizó un informe de los daños de la cubierta en agosto de 2021 en el que se especificaba la detección de una grieta “importante y humedades en una de las aulas de la planta superior” por lo que se decretó el cierre de tres clases. Ante la tardanza en la actuación, el deterioro ha ido en aumento, lo que ha supuesto el encarecimiento del arreglo.

Informe patologías

Después de una visita de los técnicos del Servicio de Infraestructura y Planificación de la delegación de Educación, junto con los concejales de Obras y Educación del municipio, acuerdan realizar un informe de patologías que determinó la inexistencia de infección en la estructura de madera original del edificio. El colegio de San Roque es el más antiguo de Arahal.

El portavoz del PP, Alberto Sanromán, en la moción denuncia al equipo de gobierno por no actuar en este tiempo, “eludiendo su responsabilidad en cuanto a su obligación de acometer las obras” que, según su criterio, “forma parte del deber de conservación y mantenimiento que corresponde a los ayuntamientos con respecto a los edificios de educación infantil”.

La Junta de Andalucía ha enviado recientemente un informe en el que delimita las competencias de cada administración, asegurando que la conservación de los centros de infantil, primaria y especial son de propiedad municipal por lo que corresponde a las administraciones locales el mantenimiento en estado óptimo de seguridad, salubridad accesibilidad universal, ornato y todo lo que exige la legalidad. 

Fiscalizar los gastos

Ante los reproches en este sentido el portavoz del PP, Javier Avecilla, concejal de Obras, explicó que no podía hacer todas los arreglos que quisiera porque “me fiscalizan los gastos. Me pasó con un campo de césped que quisimos hacer en el colegio El Ruedo y la interventora paró el proyecto porque no entraba en nuestras competencias”.

Asimismo, explicó los trámites realizados para hacerse cargo del proyecto, como la realización de un informe de las patologías que había costado 8.500 euros. “Nos hemos llevado año y medio esperando la respuesta sobre las competencias de la Junta de Andalucía, ojalá lo hubieran hecho antes”, apuntó Avecilla recalcando que se hicieron cargo de la desinfección de los centros escolares en la pandemia o de la realización de una rampa de entrada en este mismo centro.

«Los niños son nuestros»

La portavoz del PSOE, Mari Ángeles Ojeda, intervino para decir que era la administración local la que debía intervenir porque “no me vale que este tema se pase de una administración a otra. En Sevilla no conocen a los niños de San Roque. Somos los más cercanos y los que debemos dar soluciones, aunque haya que meterse después en pleitos con la Junta de Andalucía”. A su vez, recrimina al equipo de gobierno su pasividad, conminándolos a “utilizar el dinero en nuestros niños, para qué me sirve tener un nuevo pabellón si los niños en los colegios no están en condiciones”.

Para terminar el debate, intervino la alcaldesa explicando que el pasado 18 de noviembre mantuvieron una reunión en la delegación en la que solicitó el envío “urgente” de un informe aclarando las competencias para que la intervención municipal no pusiera problemas y así arreglar la cubierta del centro. “Necesitaba un documento que amparara esta inversión. La intención era meterlo en el presupuesto de 2023 que en esos días se estaba elaborando”, explica. Finalmente el informe se retrasó y llegó “la semana que aprobamos los presupuestos municipales, no sé si fue casualidad”.

Aún así, considerando el carácter urgente, se comprometió a hacer la obra. “Estamos convencidos de que no es una inversión municipal, no es nuestra competencia, por lo que después lo reclamaremos. La alcaldesa calculó que la obra superaría los 200.000 euros.