El albañil pintor que encontró en Francia su inspiración

El albañil pintor que encontró en Francia su inspiración se llama Ángel Manuel Rosado (Arahal, 1976). Vive en Tolouse desde hace 20 años y vuelve el 26 de noviembre a Arahal para exponer su obra en la Casa de Cultura.

Tiene 42 años y lleva 20 vivienda en Tolouse (Francia). De Arahal salió de la mano de la Legión Española para mas tarde pasar a la versión francesa de esta unidad militar. A final de noviembre expone sus obras en la Casa de la Cultura de Arahal. Ángel Manuel Rosado se dedica a reformar viviendas pero pinta retratos que impresionan partiendo de una foto que llama su atención en internet.

Algunas de las 12 obras cómo mínimo que expondrá a partir del 26 de noviembre en Arahal, miden más de un metro. Son todos retratos que parte de un estilo impresionista. El colorido es lo que más llama la atención y, cuánto más te alejas de la obra, más gusta. También realiza estos retratos a bolígrafo (“el mejor es el BIC) sin un error y consigue la misma expresión.

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Ángel Manuel Rosado vive en Tolouse donde expone ininterrumpidamente en la galería L’Isle Jourdain. Allí vende su obra, retratos que parten de la expresión de los ojos. “Una vez que capto la mirada de los ojos, el resto es decoración”, dice.

Comenzó a pintar en la Asociación de Vecinos Cruz de la Cava

Este pintor arahalense que empezó haciendo un curso con la asociación de vecinos Cruz de la Cava dice que, en cuanto sus cuadros le den para vivir, recorrerá el mundo. Visitará galerías y descubrirá otros ojos con expresiones que hagan que sus retratos te llamen en la distancia. Tal como pretende ahora con la exposición que trae a la Casa de la Cultura local.

Está divorciado y tiene dos hijos (12 y 14 años), su vida hecha en localidad del sur de Francia pero convencido de que es “ciudadano del mundo”. “Me adapto bien a vivir en cualquier parte”, comenta el pintor. Por lo que no descarta volver a España ni tampoco recorrer el mundo buscando miradas para sus cuadros.

¿Su pintor favorito? Sin vacilar dice: “Velázquez”. Y tiene claro por qué: “en su pintura atrapaba el alma del personaje, fue un adelantado para su época”. Y concreta que su técnica “no la tenía entonces nadie, sólo hay que observar el cuadro de Las Meninas”.

Pero también admira la luz y el color de los cuadros de Soroya. “Nadie consigue en sus cuadros la luz de este pintor”.

Ya tiene preparados los cuadros que traerá a su pueblo. La exposición se inaugura el 26 de noviembre y estará una semana en la Casa de la Cultura. Tiene ilusión por mostrar su obra donde están sus raíces. Un lugar al que vuelve cada tres meses “por lo que no me da tiempo de echarlo mucho de menos”. El resto del año está cómodo viviendo en el país galo donde a las 7 de la tarde “ya no hay nadie en la calle”. Trabaja reformando viviendas y lo hace solo. “Como cuando pinto, no puedo trabajar con nadie, me gusta hacer todo a mi manera”.