Una UTE se hace cargo del Servicio de Atención Temprana en Marchena

Comenzarán a trabajar a partir del viernes 22 de diciembre y estará atendido por tres profesionales, psicólogo, fisioterapeuta y logopeda, como las familias llevan años reclamando

C. GONZÁLEZ

Marchena (Sevilla)

Una Unión Temporal de Empresas ha sido la adjudicataria del contrato para prestar el Servicio de Atención Temprana (CAIT) en Marchena por dos años. Comenzará el próximo viernes, 22 de diciembre, en un local acondicionado al que asistirán 68 menores de la localidad.

El presupuesto de contratación es de 73.440 euros anuales lo que equivale a 4.080 sesiones. Lo usuarios son menores, de 0 a 6 años, afectados por algún tipo de trastorno que impiden su normal desarrollo cognitivo, emocional, del lenguaje, expresión somática, comunicación y relaciones o regulación y comportamiento.

La empresa es una UTE, unión de dos empresas Macrosad y Girasol, esta última dirigida por María Esther Fernández, logopeda de Alcalá de Guadaíra. Según informa el presidente de la Plataforma Andalucía de Atención Temprana, Antonio Guerrero, sólo quedan 23 ayuntamientos en toda la región que se hagan cargo de la prestación de este servicio, el resto se ha adjudicado a empresas o asociaciones que aseguran ‘una correcta prestación’.

Hasta ahora, ha sido el Ayuntamiento de Marchena el que ha prestado este servicio por medio de una psicóloga del área de Servicios Sociales, de hecho el pasado martes desde la secretaria municipal enviaron una nota de prensa indicando que seguirían prestándolo hasta que no se adjudicara. Antonio Guerrero ha informado a esta web que el servicio ya se había adjudicado.

No obstante, las familias llevan años reclamando una mejora del mismo porque se trata de una atención especializada que requiere de la atención de tres tipos de profesionales diferentes: Logopeda, fisioterapeuta y psicóloga. Esta atención concreta está estipulada por ley ya que los trastornos son tan diversos que es la única manera de que la atención sea completa y adecuada.

Según uno de los padres de los menores usuarios de este servicio, José Luis Vázquez, en Marchena siempre ha sido deficitario, porque se ha atendido con el trabajo de una sola funcionaria, profesional de la psicología. ‘Cuando esta mujer cogía vacaciones, como es su derecho, los niños dejaban de ir a las sesiones por lo que se frena su desarrollo’, explica.

Por esta razón, las familias afectadas llevan años reclamando un cambio que ahora ha sido posible gracias a la adjudicación del servicio a esta UTE. La adjudicación es efectiva desde el lunes. Y cuentan que, en principio, la puesta en marcha del servicio iba a sufrir un retraso porque la UTE había alquilado un local que no reunía las condiciones para llevarlo a cabo. Dicho local está en la calle Santa Clara.

Las familias se han puesto en contacto con la UTE para acelerar el procedimiento y la empresa han alquilado por tres meses, prorrogables a 6, tres despachos en la Clínica Avenida, situada en la Avenida Maestro Santo Ruano. A partir del viernes, comenzarán a llamar a las familias para organizar las citas.

Para Antonio Guerrero, que empresas especializadas se hagan cargo de este servicio es garantía de que los niños estarán bien atendidos. ‘Cada vez son menos los ayuntamientos que lo prestan porque suele ser más deficientes’. Cuando esta UTE se presentó para participar en su licitación, estuvieron informándose de su trabajo. ‘Se trata de una empresa con 1700 trabajadores en plantilla, con la cuenta de resultados saneada, que atiende a sus pagos’, explica.

Los locales tienen por ley que reunir una serie de características entre ellas que estén climatizados, máxima luz natural, ausencia de barreras arquitectónicas y de 10 a 12 metros cuadrados debe tener cada gabinete.